No sé muy bien cuando ni donde aprendí a cocinar la leche frita pero llevo muchos años haciéndola en mi familia. Unos le añaden más anís, otros más canela y algunos lo prefieren sin nada pero en todas sus versiones sabe igual de buena. Y con lo fácil que es hacerla es ideal para esos fines de semana que te apetece algo dulce.
INGREDIENTES:
- 1 litro de leche fresca entera
- 150 g de maicena
- 150 g de azúcar
- Una rama de canela
- 1 huevo
- Harina (para el rebozado)
- Aceite (para freír)
- Chorrito de anís
En un cazo introducir la leche, la maicena, el azúcar y la canela. Llevar al fuego sin dejar de remover hasta formar una emulsión espesa y sin grumos.
Retirar del fuego el cazo y verter la emulsión e en una bandeja de dos centímetros de altura, como mínimo, ya que este sera el grosor deseado.
Dejar enfriar para que cuaje y así poder manipular.
Desmoldar el resultado encima del mármol o en una bandeja mas grande para poder cortar los cuadrados al tamaño que elijamos. Pasar los trozos por un huevo batido y después por la harina mirando que quede bien rebozado. Seguidamente, freír.
Al freír los trozos en una sartén, con abundante aceite, hay que tener cuidado para que no se rompan.
Una vez frió, espolvorear con canela y unas gotas de anís.
Se ve deliciosa!!!
ResponderEliminarMil besosssss
A veces las recetas mas sencillas son las más deliciosas, a que si??? Esas fotos lo dicen todo!!!
ResponderEliminarUn abrazo
Ese bocado se ve genial... nunca he hecho la leche frita y la primera vez que la probe me encanto.
ResponderEliminarUn saludo
Gracias chicas!!! No sabéis que ilusión me hacen vuestros comentarios.
ResponderEliminarOs deseo feliz Navidad de todo corazon